
Los beneficios potenciales del té para la salud han sido ampliamente divulgados, pero los científicos han descubierto otro más que añadir a la lista.
Según un nuevo estudio, las hojas de té actuarían como un filtro que elimina del agua metales pesados potencialmente nocivos, como el plomo, reseñó Euronews.
Unos investigadores de Estados Unidos han probado distintas variedades de té -verde, negro, oolong, blanco, manzanilla y rooibos- en infusión con un agua que contenía cantidades conocidas de plomo y otros metales como cromo, cobre, zinc y cadmio. Después de prepararlo a 85 grados Celsius, evaluaron la cantidad de metales absorbidos en distintos intervalos de tiempo.
Según los resultados publicados en la revista ACS Food Science & Technology, la preparación de una taza de té estándar podría suponer la eliminación del 15 % del plomo del agua potable.
La exposición al plomo puede provocar problemas crónicos de salud: una dosis elevada pueden causar daños cerebrales y renales en los casos más graves.
Benjamin Shindel, estudiante de doctorado en la Universidad Northwestern (EEUU) y primer autor del estudio, afirma en un comunicado: «Las hojas de té tienen una gran superficie activa, una propiedad muy útil para un material absorbente y que libera rápidamente sustancias químicas aromáticas en el agua».
Shindel también destacó lo práctico del proceso, ya que el té es la bebida más consumida en el mundo, con 6,5 millones de toneladas en 2022.
«Con el té la gente no necesita hacer nada extra. Basta con poner las hojas en el agua y remojarlas, y eliminan los metales de forma natural», añadió.