La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, condenó la declaración de Santo Domingo y la resolución de la OEA, impulsadas por Estados Unidos, que promueven la disidencia interna en Venezuela.

Zajárova manifestó el respaldo de Rusia a Venezuela ante la injerencia externa posterior a las elecciones del 28 de julio, destacando que las autoridades han mantenido la estabilidad y el orden constitucional, a pesar de los intentos de deslegitimar los resultados.

La funcionaria subrayó que «Occidente no está insatisfecho con el proceso electoral, sino con los resultados. Se pueden celebrar elecciones repetidamente, pero hasta que el resultado favorito de Occidente se logre, no se calmarán».

Además, Zajárova calificó de «incitación directa a la desestabilización» el llamado a la desobediencia de las fuerzas armadas hacia las autoridades legítimas, advirtiendo que esto podría generar caos controlado en Venezuela y, por ende, nuevas oleadas de inmigración.