
Este miércoles, las fuerzas de seguridad de Argentina llevaron a cabo una fuerte represión en las protestas de jubilados y otros sectores sociales que exigen pensiones más altas y el fin de las medidas de austeridad implementadas por el presidente Javier Milei.
La manifestación, que tuvo lugar en las afueras del Congreso, está respaldada por aficionados de diversos equipos de fútbol, organizaciones sociales, sindicatos y partidos de la oposición.
A pesar de la magnitud del apoyo, las fuerzas del orden utilizaron camiones hidrantes, balas de goma y gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.
Durante los enfrentamientos, una mujer de 87 años, identificada como Beatriz Blanco, resultó herida en la cabeza y la trasladaron de urgencia al Hospital Argerich.
En este contexto, imágenes difundidas en redes sociales muestran como un efectivo de la policía golpea a la mujer de la tercera edad, tras lo cual, ésta se desploma en el piso.
Por otra parte, los incidentes comenzaron a las 16:30, media hora antes del inicio de la marcha, y se desplegaron más de mil efectivos de seguridad para impedir el bloqueo de calles en las inmediaciones del Palacio Legislativo.
Los policías antidisturbios, equipados al estilo SWAT, dispararon balas de goma contra la multitud que manifestaba pacíficamente.
A lo largo de la protesta, los jubilados, quienes marchan cada miércoles, recibieron el apoyo incondicional de hinchas de más de 20 clubes de fútbol. Juntos, exigen un aumento de pensiones y la recuperación de sus haberes, así como el acceso a medicamentos.