
“¿Queda algo de humanidad?”, se preguntó el comisionado general de la Agencia de la ONU para los refugiados, Philippe Lazzarin, al informar sobre un nuevo ataque a la ciudad de Gaza, está vez en una escuela de la agencia UNRWA.
Denunció a través de su cuenta en la red social X, “no podemos permitir que lo insoportable se convierta en una nueva norma. Basta ya. Un alto el fuego es más que debido”, añadió, al tiempo que aseguró que los más afectados en situaciones de conflicto son los niños.
Por su parte, la portavoz de la UNRWA, Louise Wateridge, escribió en una publicación en la referida red social que “ningún lugar de la Franja de Gaza es seguro… Da la sensación de que la gente está esperando la muerte”.
Explicó que, con las operaciones militares en curso y las continuas órdenes de evacuación, la gente «nunca está ahora a más de unas cuadras de la línea de combate».