Japón compartió sus planes de construir un ascensor espacial, una megaestructura que podría revolucionar los viajes al espacio. Este ambicioso proyecto, liderado por la Facultad de Ingeniería de la Universidad Shizuoka, busca alcanzar una altura de 400 kilómetros, suficiente para llegar a la órbita de la Estación Espacial Internacional.

La idea surge como respuesta a los altos costos y riesgos asociados con los cohetes, que han sido fundamentales en los programas espaciales globales. A pesar de los avances de compañías como SpaceX, que han enfrentado accidentes y explosiones en sus lanzamientos, el ascensor espacial promete ofrecer una alternativa más segura y económica.

El diseño contempla un cable de 96,000 kilómetros hecho de nanotubos de carbono, que permitirá transportar hasta 30 personas en cápsulas movidas por cables a una velocidad aproximada de 200 kilómetros por hora. La meta es tener una versión funcional lista para el año 2050, aunque el proyecto enfrenta desafíos significativos en ingeniería, materiales y seguridad.

Este ascensor no solo facilitaría el acceso a la órbita terrestre, sino que también podría reducir drásticamente los costos de transporte al espacio, estimándose que podría llevar a humanos a Marte en tan solo 40 días. La construcción del ascensor comenzará este 2025, con el objetivo de hacer realidad esta visión futurista que busca transformar la manera en que exploramos el espacio.