
Cientos de desplazados emprendieron el camino de regreso a sus casas, entre edificios destruidos del norte de Gaza, aprovechando la entrada en vigor de un alto el fuego entre Hamás e Israel en el devastado territorio palestino.
Tras más de 15 meses de guerra, los desplazados pasaron por paisajes desoladores, montículos de hormigón pulverizado y edificios en ruinas.
«Vinimos aquí a las seis de la mañana y nos encontramos con una destrucción masiva, nunca vista», describió este domingo Walid Abu Jiab en Jabaliya.
«No queda nada en el norte por lo que merezca la pena vivir», añadió desde esta localidad del norte de la Franja de Gaza.
A ambos lados de la carretera, antiguos edificios yacen destruidos tras meses de bombardeos del ejército israelí, que lanzó una operación militar en esta parte del territorio en octubre de 2023 para, según sus palabras, evitar el reagrupamiento de los combatientes de Hamás.
Rana Mohsen, desplazada de Jabaliya a Ciudad de Gaza, afirmó que no esperó el comienzo oficial del alto el fuego. «Llevamos 16 meses esperando este momento», dijo la mujer, de 43 años y madre de tres hijos.
«Mi alegría es indescriptible. Por fin estamos en nuestro hogar. Y no queda nada, sólo escombros, pero es nuestra casa. Tenemos suerte porque parte del tejado sigue intacto», declaró a AFP.
«La magnitud de la destrucción es inimaginable. Edificios y lugares emblemáticos han desaparecido por completo, como si fuera una ciudad fantasma o abandonada», agregó.
Tanques israelíes destruidos
Además, despúes de regresar a zonas donde hubo combates, palestinos también publicaron fotos de equipos militares israelíes destruidos.

