
Chespirito sin querer queriendo, es una nueva serie biográfica estrenada en Max donde se revivirán las memorias de Roberto Gómez Bolaño.
“La gente ya conoce a Chespirito alrededor del mundo y no es gracias a nosotros. La parte más difícil es que le hiciéramos justicia a ese legado y que contemos una historia que nos permita conocer otros rasgos de la vida de Roberto Bolaños”, explicó en una entrevista para la agencia EFE, Pablo Cruz Guerrero, actor que da vida en la adaptación al comediante.
Se trata de un formato de serie para televisión de las memorias escritas por Gómez Bolaños antes de fallecer hace ya más de 10 años, en las que repasa desde sus comienzos en el mundo del humor en la década de 1960 hasta algunos de los episodios más reconocidos del Chavo, como su visita a Acapulco.
“Él sabía que parte de su labor era llevar felicidad a toda Latinoamérica. A todos les decía, tienes esta responsabilidad, te ven 300 millones de personas, no les hagas daño. Era de lo que más orgulloso se sentía”, explica emocionado su hijo y también productor de la serie Roberto Gómez.
La serie no ha estado exenta de polémica desde sus primeros avances debido a la petición de no inclusión de su nombre e imagen por parte de la viuda de Gómez Bolaños, Florinda Meza, quien junto a personajes como Quico o Don Ramón formó parte de la vecindad número 8 desde la década de 1970 con Doña Florinda.
A pesar de las disputas que hubo entre varios de los intérpretes con Bolaños, como la pelea por el reconocimiento del personaje de Quico por parte de su intérprete Carlos Villagrán, según el actor que da vida a este último, Juan Lecanda, es admirable “la capacidad para hacer reír”.
“Era una familia que se veían las caras a diario, y a veces como actor puede ser cansado. (…). Esa capacidad que ellos tuvieron para a pesar de todo hacer comedia ha hecho que hayan trascendido con un programa de hace 50 años”, comenta Lecanda.