
Los sistemas de defensa antiaérea rusa derribaron este domingo 95 drones ucranianos sobre 14 regiones del país, según informó, el Ministerio de Defensa de Rusia.
El ataque más relevante del día tuvo como objetivo la Central Nuclear de Kursk (KNPP), ubicado en la provincia homónima. Según el servicio de prensa de la planta, un dron ucraniano fue derribado cerca de sus instalaciones.
Al caer, el aparato se detonó y causó daños en un transformador auxiliar, provocando un incendio que ya fue extinguido. Como resultado del ataque, la Unidad 3 de la planta redujo su capacidad al 50%.
A pesar de los daños materiales y la interrupción en el suministro de energía, las autoridades de la central nuclear informaron que no se produjo ninguna fuga de radiación ni hubo heridos en la instalación.
El gobernador en funciones, Alexander Khinshtein, condenó el ataque, calificándolo de “crimen de guerra y una amenaza para la seguridad nuclear”, en clara referencia a los riesgos inherentes a este tipo de instalaciones.
Durante la jornada, 95 aparatos aéreos no tripulados fueron derribados sobre amplias zonas del territorio ruso, incluyendo las regiones de Briansk, Leningrado, Kursk, Samara y Crimea. Los ataques provocaron daños en infraestructuras civiles.
Los fragmentos de un dron interceptado sobre el puerto de Ust-Luga causaron un incendio en una terminal de gas de la empresa Novatek. Por su parte, el gobernador de Samara, Viacheslav Fedoríschev, denunció un ataque con drones contra una empresa industrial en la ciudad de Sízran.
T/Telesur

