
La Franja de Gaza enfrenta una catastrófica realidad mientras los líderes mundiales y los organismos internacionales han demostrado ser inútiles frente a la alianza genocida de Israel y Estados Unidos y su industria de la guerra y el colonialismo.
En el contexto de la aprobación de un plan del gabinete de Seguridad del Gobierno de Benjamín Netanyahu para la ocupación total del territorio del enclave palestino, los ataques indiscriminados y bombardeos en el enclave —que en las últimas semanas se han intensificado en la principal ciudad y centro urbano de la Franja (Ciudad de Gaza)— ya dejan 61.827 palestinos asesinados y al menos 155.275 heridos, según cifras del Ministerio de Salud gazatí.
Mientras, la hambruna provocada por más de cinco meses de bloqueo y control de la distribución de ayuda humanitaria, sumados a las casi dos décadas que Israel lleva controlando qué entra y qué no a la Franja, ya dejan al menos 251 muertos por inanición y desnutrición, entre ellos 108 infantes, según informó también la cartera de Salud de Gaza.
Recientemente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó sobre la grave crisis alimentaria, indicando que la desnutrición aguda afecta a más del 10 % de la población de Gaza y a más del 20 % de las mujeres embarazadas y lactantes, informó Telesur.