El Gobierno de China ha elevado una queja formal ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) en respuesta a la reciente decisión de la Unión Europea de incrementar los aranceles a los vehículos eléctricos importados desde China, exacerbando las ya tensas relaciones comerciales entre el bloque europeo y la nación asiática.

La medida de la UE sigue a la finalización de una investigación antisubvenciones, que ha resultado en la imposición de aranceles significativos. La Comisión Europea anunció que impondrá una tarifa del 17% a los automóviles fabricados por BYD, del 18,8% a los de Geely, y un 35,3% a los vehículos de SAIC, una empresa estatal china. Otros fabricantes, incluidas compañías occidentales como Volkswagen y BMW, enfrentarán tarifas del 20,7%, mientras que Tesla tendrá un arancel del 7,8%^1.

El Ministerio de Comercio de China ha declarado que «no está de acuerdo ni acepta» las medidas adoptadas por la UE y ha decidido llevar el asunto al mecanismo de resolución de disputas de la OMC. La queja presentada subraya el compromiso de China de proteger los derechos e intereses legítimos de sus empresas y solicita la revisión de estas políticas comerciales que consideran injustas.

Tensiones comerciales y reacciones

La decisión ha avivado las tensiones comerciales, con la Comisión Europea justificando la medida como un paso necesario para asegurar prácticas de mercado justas y proteger la industria automovilística europea. Valdis Dombrovskis, vicepresidente de la Comisión, afirmó que estas medidas buscan garantizar una competencia equitativa en el sector de los vehículos eléctricos^2.

Por su parte, Alemania, la mayor economía del bloque, ha expresado su inquietud respecto a los nuevos aranceles. Hildegard Müller, líder de la asociación de la industria automotriz alemana, calificó los impuestos como un «retroceso para el libre comercio global» y un obstáculo para el crecimiento europeo, instando a resolver estas diferencias mediante el diálogo^2.

China dispuesta al Diálogo

En línea con su enfoque de resolución pacífica, el Ministerio de Comercio chino ha reiterado su disposición a negociar con la UE para encontrar una solución mutuamente aceptable y evitar una escalada del conflicto comercial. “Esperamos que la parte europea trabaje con China de manera constructiva […] y alcance una solución aceptable para ambas partes lo antes posible para evitar una escalada de fricciones comerciales”, señaló un portavoz del Ministerio^1.

El incremento en las tarifas entra en vigor este miércoles y se prevé que se mantenga durante cinco años, a menos que se logre un acuerdo en etapas posteriores de la negociación. (RT/Euronews)